martes, 25 de enero de 2011

El fenómeno del amor. Capítulo IV : La no-cita (2ª Parte)

Despegaron finalmente sus labios, y Alice sonrió. Will, sin ni siquiera pensarlo, dijo como automáticamente:

- Alice, te quiero. Aunque no lo sabía hasta hace unos minutos, pero te quise desde el primer momento en que te vi.
- Te resultará extraño, pero también me ha ocurrido lo mismo.
- ¿De verdad?
- Yo también estoy enamorada de ti, Donovan-dijo Alice, sonriendo-.
- Y… ¿Te apetecería quedarte conmigo a ver cómo anochece?
- Por nada del mundo me lo perdería.

Will había encontrado sin ninguna duda a la mujer de su vida, y Alice estaba segura de que aquel era el chico con el que siempre había soñado. Ambos eran tal para cual. Habían tenido la suerte de conocerse, y luego de enamorarse. Era un sentimiento tan maravilloso… Ojalá no acabara nunca.

Pero Alice empezó a sentirse más insegura a cada momento que pasaba. Era ahora o nunca. Tenía que mostrarle a Donovan su verdadero yo.

- Donovan…Tengo… tengo algo que decirte.
- Y yo a ti, Alyson. Mi verdadero nombre no es Donovan, sino William.
- Mi nombre tampoco es el que tú piensas, ni siquiera yo misma. Me llamo Alice,- dijo Alice, a la vez que se quitaba la máscara y mostraba a William su verdadero rostro- Alice Sutherland.

El escuchar aquel nombre y ver que la chica a la que acababa de besar era en realidad la adolescente más famosa y bella del mundo fue demasiado para Will, que se desmayó sobre el suelo del parque.

Despertó unos minutos después.

- Siento no habértelo dicho antes, Will, pero tenía miedo de que…
- ¿De qué?
- De que no fueras realmente el tío tan majo que conocí en la fiesta.
- Pues ahora sabes que sí lo soy. O al menos eso espero.
- Sí, ahora lo sé.
- ¿Y por qué hoy? Quiero decir, ¿de verdad has sido Alice Sutherland todo este tiempo y nunca me he dado cuenta?
- Sí. Pero quiero que sepas que si te lo he dicho ha sido porque pensaba que era lo mejor, ahora que sé que estoy enamorada de ti. Y, además, creo que ahora que los dos sabemos la verdad podríamos…
- ¿Hacer que nuestra relación funcionara?
- Sólo si tú también estás dispuesto.
- Por supuesto-Alice sonrió como nunca-. Te quiero, Alice. Y aunque no me acabe de acostumbrar a eso de estar saliendo con una famosa, creo que podría funcionar.

Transcurrido unos instantes de silencio, ambos sonrieron y, con un romántico y apasionado beso comenzaron la relación.

Alice y Will se tumbaron boca arriba en la hierba cuando anocheció, observando las estrellas para poder pedir un deseo cuando vieran una estrella fugaz, aunque realmente no había nada que desearán más que estar allí, juntos. Abrazados el uno al otro, se volvieron a besar dulcemente, bajo aquel inmenso manto de estrellas y planetas. Se querían, y la felicidad los inundaba con una poderosa fuerza. Finalmente, ambos se durmieron bajo la protección de la copa de un árbol cercano.

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Soy el número cuatro

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Me encanta esta peli :)